viernes, 12 de junio de 2009

La enseñanza desigual

Titular en El País de ayer:
"Uno de cada cuatro niños no tiene el nivel básico para pasar a la Secundaria en Cataluña
Las chicas son mejores en lengua y los chicos en matemáticas"

El artículo continúa:
"Uno de cada cuatro de los 60.000 alumnos de 11 y 12 años que cursan sexto de primaria no han superado la primera prueba de final de esta etapa hecha por primera vez en Cataluña. Los resultados no sólo son poco brillantes, sino también desiguales: entre chicos y chicas y entre los niveles socieconómico [sic] de los centros y las familias."

Por supuesto que no es una buena noticia, pero como no soy partidaria de análisis alarmistas afirmo que no es nada nuevo. Creo que siempre ha habido chicos o chicas que no tenían el nivel básico para cursar secundaria, en Cataluña, en el resto de la Península y lo mismo en otros países. El problema ha sido siempre, y sigue sin estar resuelto, la falta de alternativas, algo que existe en Alemania, donde la criba se realiza a los 10 años, pasando unos al Gymnasium, los que probablemente acaben en la universidad, y otros a las otras escuelas de secundaria, Hauptschulen y Realschulen, donde los planes de estudio son menos teóricos y tratan de enfocarse hacia otras salidas profesionales. No obstante, teniendo en cuenta los malos resultados que obtuvo Alemania en el Informe Pisa, que causó una gran conmoción, no parece que el sistema funcione mejor, pero sí que está mejor organizado, que ya es algo.

Lo alarmante para mí es que el hecho de que el nivel socioeconómico influya tanto en el éxito escolar, y pienso que es una tendencia a constatar en todas partes. Mi generación viene en su mayoría de padres sin estudios, la mayoría hemos estado en colegios estatales, y a pesar de todo, muchos hemos realizado estudios universitarios. Aquí la tendencia es, padres con estudios universitarios, hijos con estudios universitarios. Pero por otra parte, algo que me parece muy positivo es que la sociedad alemana tenga asumido que el no realizar estudios universitarios sea tan legítimo como realizarlos, algo a lo que en España no se volverá, por la falta de alternativas quizá, pero en parte también por la mentalidad de que todo el mundo tiene que estudiar. Aquí hay muchas otras salidas profesionales que puedes concluir con un título y con incluso más perspectivas laborales. Y ahí se puede mejorar mucho en España.

Para mí el problema empieza en primaria. En Alemania se pueden trazar mapas socioeconómicos que corresponderán al nivel escolar, y se podría repartir a casi todos los alumnos según un "dime donde vives y te diré cómo te va a ir en el colegio". Y eso es triste. Colegios en buenas zonas tienen más medios, simplemente porque los padres tienen más medios, y si los resultados son mejores es porque los padres están más detrás de sus hijos, no necesariamente de una forma positiva, pues nuestros padres no se involucraban tanto y salimos adelante. El otro día nos contaba la directora del colegio que en Hamburgo la Consejería de Educación reparte a los colegios en seis categorías, del 1 al 6, respecto a la hora de repartir el pastel. Los del 1 son los que más ayudas necesitan y los que más reciben del Estado, los del 6 los que menos, pero reciben todo lo necesario, y los del medio son los peor parados. No reciben las ayudas en la cuantía de los de más bajo nivel económico, pero no tienen medios propios como los de las escuelas del nivel 5 ó 6 para compensar lo que falta. En Alemania los colegios privados son prácticamente inexistentes, con lo cual las familias adineradas mandan también a sus hijos a los colegios públicos, y por lo tanto la repartición se hace también en base al nivel económico, pues si me puedo permitir vivir en este barrio, mi hijo puede ir entonces a este colegio tan bien organizado y con niños que rinden más. Y lo que se hace es que se pide que las familias contribuyan de manera voluntaria con una cantidad anual, con lo que se realizan mejoras en las instalaciones o se pagan algunos extras. Estas tres categorías vienen a equivaler a la enseñanza pública, concertada o privada en España, salvo que en Alemania se trata de centros públicos y las diferencias son mas sutiles.

Lo de que a las chicas se les dé mejor lengua y a los chicos matemáticas, es algo que siempre me ha hecho pensar, ya que yo soy una típica chica (para qué lo voy a negar). Pero conozco mujeres a las que se les dan muy bien las matemáticas y hombres con dotes lingüísticas fascinantes. El resultado de los estudios es ése, y lo sé, pero me inclino a pensar que es debido a la educación machista aún imperante. Sin querer, inculcamos ciertas habilidades a un sexo u otro, y las chicas, que en nuestra concepción pueden ser más soñadoras y más creativas que los chicos, podrían dar en lengua rienda suelta a estas habilidades, mientras que los chicos, que han de ser más controlados y calculadores, se manejan mejor en el coto cerrado de la ciencia. Simple, pero tan simplista como la visión que le damos a la vida misma. Una vez oí a una profesora alemana decir que está comprobado que a los niños que tocan un instrumento se les dan mejor las matemáticas (por suerte no dijo si chico o chica), pero se quedó tan ancha. Claro, por eso será que a mí nunca se me dieron bien... pensé.

De todas formas, en un artículo en el que el rigor lingüístico deja mucho que desear, escribiendo la palabra "socioeconómico" muchas veces mal: "socieconómico" y una "soceconómico", o en el que en el título pone "pasar a la Secundaria", no creo que uno pueda sacar conclusiones sobre el nivel de la enseñanza. Apliquemos el rigor de los estudios y de las estadísticas a la vida misma y tratemos de cambiar la concepción rígida de que todos los niños han de ser iguales (lo siento, no lo son), y que todos tenemos las mismas oportunidades. En un mundo ideal debería ser así, pero la realidad es otra, por desgracia.

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